Hay piezas que nos acompañan a lo largo de nuestra vida. La sillita sobre la que gira este post es un ejemplo de ello.
¡Nos ha encantado! Así podríamos resumir cómo ha sido el proceso de restauración que hemos realizado en esta sillita, a la que nos gusta llamar ‘sillita de María Isabel’, haciendo un guiño a su dueña de toda la vida. Llegó a su vida siendo ella muy pequeña, la ha acompañado en los momentos clave de su vida y, hace unos meses, decidió que quería que la esperase en su casa de verano y, así, recordar momentos de su infancia y juventud. Y es que los muebles son capaces de hacernos retroceder en el tiempo y recuperar momentos que pensábamos perdidos y olvidados.
Como puede apreciarse en las imágenes, era una pieza bastante deteriorada por el paso del tiempo y el desgaste que había provocado la carcoma era apreciable, por eso decidimos darle un aire nuevo aunque manteniendo su esencia. Finalmente, la sillita fue pintada en color azul oscuro y la hicimos un nuevo asiento, tapizándolo con tela estampada en tonos negros y grises.
Una monada que ya forma parte de su nuevo escenario.